Ruta literaria de ‘Huyendo a Granada’
Tras los pasos de Bashira
El domingo 20 de marzo amaneció soleado y con una temperatura que invitaba a pasear; y eso nos dispusimos a hacer. Unos minutos antes de las 10.30 h, treinta personas de la comunidad educativa del colegio Juan XXIII-Chana fuimos acudiendo a nuestra cita con Bashira, la protagonista de Huyendo a Granada, novela histórica de Victoria Eugenia Muñoz Jiménez, en la fuente del Paseo de los Tristes bajo la imponente torre de Comares. La mañana se presentaba magnífica: teníamos por delante un paseo que nos llevaría, a los integrantes de la ruta y a la autora, a algunos de los rincones más bonitos de Granada como la Casa Morisca Horno de Oro, el Bañuelo, el hospital del Maristán (en fase de restauración), la Calderería, el Corral del Carbón, la Madraza, la Alcaicería y Plaza Bib-Rambla.
En cada parada nos fuimos acercando a la trama de esta novela, ambientada en la Granada de 1475-1480, y conociendo a sus personajes a través de la lectura de algunos pasajes de la obra que iban poniendo en relación el lugar que pisaban nuestros pies con lo que ocurre en la narración. Y hubo ocasión, además, para conocer algo de la historia y datos curiosos de los sitios visitados que nos ayudaron a viajar de algún modo hasta esos últimos años del siglo XV; casi pudimos sentir el vapor en la sala templada del Bañuelo o percibir el agradable aroma del romero y el tomillo quemados en su caldera mientras llegaba hasta nosotros la luz difuminada que se colaba por las claraboyas estrelladas y octogonales de las bóvedas que cubrían nuestras cabezas.
Fue una grata mañana en compañía de personas muy agradables en la que también pudimos “degustar la novela” porque hicimos una parada en Diwan, una de las pastelerías de la Calderería, para que pudiéramos probar las chebakias, unos riquísimos dulces de almendra y miel que Bashira elabora en la novela, que hicieron las delicias de todos los que los probaron allí; otros prefirieron llevárselos a casa para acompañarlos con un café en la sobremesa.
Finalizada la ruta en plaza Bib-Rambla, donde en aquella época se ubicaba un mercado de esclavos, todos regresamos a casa con una sensación placentera por ese paseo en agradable compañía lleno de lugares hermosos cargados de historia, literatura y dulces compartidos.
Os dejamos algunas fotografías de la ruta realizadas por Beatriz Mª Muñoz y Mª Ángeles García.
